Si eres amante del café pero prefieres disfrutarlo sin cafeína, es interesante conocer cómo se le quita la cafeína al café. A lo largo de la historia, se han desarrollado diferentes métodos para descafeinar el café, con el objetivo de eliminar la cafeína sin afectar el sabor y aroma característicos de esta popular bebida.
El descubrimiento de la cafeína
La cafeína, una de las drogas más consumidas en el entorno moderno, fue descubierta por el químico alemán Friedlieb Ferdinand Runge en el siglo XIX. Runge fue solicitado por el poeta alemán Goethe para analizar unos granos de café que había recibido.
Runge logró aislar la cafeína de los granos de café, lo que dio inicio a la investigación sobre esta sustancia estimulante. Desde entonces, la cafeína ha estado estrechamente relacionada con el café, aunque también se encuentra presente en otras bebidas y alimentos como el té y el chocolate.
El proceso de descafeinización
El proceso de descafeinización del café ha evolucionado a lo largo del tiempo. El primer método práctico de descafeinización fue desarrollado por Ludwig Roselius, jefe de la compañía de café Kaffee HAG, en 190Roselius descubrió accidentalmente que al bañar los granos de café en vapor con ácidos y benceno, se podía eliminar la cafeína sin afectar el sabor.
Sin embargo, posteriormente se descubrió que el benceno era un posible carcinógeno, por lo que se buscaron nuevas técnicas para eliminar la cafeína del café sin utilizar sustancias peligrosas.
Actualmente, existen diferentes métodos de descafeinización del café, pero el más común es el remojo de los granos en un disolvente, como el cloruro de metileno o el acetato de etilo. Estos solventes extraen la cafeína de los granos, mientras se preserva el sabor y aroma del café.
El proceso comienza con el remojo de los granos en agua, seguido de su exposición al disolvente. El agua con disolvente se reutiliza varias veces, hasta que se llena con compuestos de café y aromatizantes, similares a los granos pero sin cafeína ni disolvente.
Los métodos de descafeinización más comunes
Además del método de remojo en disolventes, existen otras técnicas de descafeinización del café. Una de ellas es el método Swiss Water, que utiliza agua para extraer la cafeína de los granos. Esta solución rica en cafeína se filtra a través de carbón activado para capturar la cafeína, sin utilizar disolventes.
Otro método utiliza dióxido de carbono súper crítico para eliminar la cafeína. Los granos se remojan en agua y luego se colocan en un extractor de acero inoxidable, donde se agrega CO2 líquido a alta presión. El CO2 se une a las moléculas de cafeína, que luego se retiran junto con el gas.
¿Es seguro consumir café descafeinado?
La descafeinización del café utilizando los métodos mencionados ha sido aprobada por las agencias de salud, como la Administración de Alimentos y Fármacos de EE. UU. (FDA). Estos métodos garantizan que la cantidad residual de disolventes sea mínima y no represente un riesgo para la salud.
Si bien los métodos de descafeinización pueden implicar el uso de sustancias químicas, los niveles utilizados son seguros para el consumo humano. Sin embargo, es importante recordar que el café descafeinado no está completamente libre de cafeína.
La descafeinización del café es un proceso complejo pero seguro, que permite disfrutar de esta popular bebida sin los efectos estimulantes de la cafeína. Los métodos utilizados eliminan la cafeína sin afectar el sabor y aroma característicos del café, brindando opciones para aquellos que prefieren evitar o reducir su consumo de cafeína.