El café es una de las bebidas más consumidas en el entorno y para muchos es un componente esencial en su rutina diaria. Sin embargo, su consumo puede tener efectos negativos en la salud digestiva de algunas personas, especialmente en lo que se refiere al reflujo gástrico.
¿Qué provoca el café en el estómago?
El café es una bebida ácida que puede provocar o empeorar el reflujo gástrico en algunas personas. El ácido clorogénico presente en el café puede aumentar la producción de ácido en el estómago, lo que a su vez puede causar irritación en el esófago y provocar síntomas de reflujo como acidez estomacal, regurgitación y dolor en el pecho.
¿Cómo afecta el café a quienes padecen reflujo gástrico?
Para las personas que ya padecen de reflujo gástrico, el consumo de café puede agravar sus síntomas y causar molestias adicionales. El café relaja el esfínter esofágico inferior, lo que facilita el paso del ácido estomacal al esófago y puede provocar una sensación de ardor en la garganta y el pecho.
Además, el café puede estimular la producción de ácido gástrico, lo que contribuye a empeorar la acidez estomacal y el malestar en personas con reflujo gástrico crónico.
Consejos para reducir el impacto del café en el reflujo gástrico
- Reducir la cantidad: Limitar la cantidad de café consumida diariamente puede ayudar a disminuir los síntomas de reflujo gástrico.
- Evitar el café antes de acostarse: Consumir café por la mañana en lugar de hacerlo por la tarde o noche puede reducir el impacto en el reflujo gástrico.
- Considerar alternativas: Si el café empeora significativamente los síntomas de reflujo, se puede optar por alternativas como el café descafeinado o infusiones menos ácidas.
Consultas habituales sobre el café y el reflujo gástrico
¿Todos los tipos de café afectan por igual en el reflujo gástrico?
No necesariamente. El café descafeinado, por ejemplo, puede tener un impacto menor en el reflujo gástrico debido a su menor contenido de cafeína.
¿Es recomendable consumir café con leche para reducir el riesgo de reflujo?
Agregar leche al café puede ayudar a reducir su impacto en el reflujo gástrico, ya que la leche puede neutralizar parte de la acidez del café. Sin embargo, esto puede variar de una persona a otra, por lo que es importante observar cómo reacciona el cuerpo individualmente.